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    Un estilo de vida envuelto en poesía, escritura y arte

    ¿Por qué escribimos?

    ¿Qué es eso que nos lleva a expresarnos a través de letras, palabras y oraciones aprendidas desde la infancia que, aunque parecen no tener sentido en ese preciso instante, componen la versión de ese momento de nuestras vidas? Aquellos caracteres y signos hacen que el tiempo se detenga en un silencio absoluto e inmortalizan puntos cardinales de nuestro paso por el mundo: cada uno cobra voz propia, entonación y hasta colores únicos e indescifrables. Lo que escribimos es lo que somos, lo que hemos vivido, lo que nuestras pupilas han visto, las razones por la cual nuestra respiración se acelera y la conexión entre el pasado, el presente y el futuro.

    “Creo que la poesía es como oxígeno en el aire.
    Solo constituye una pequeña parte
    de nuestras vidas, pero es lo que
    nos mantiene vivos”.

    La poeta, artista y autora bestseller, Kamilla Tolnø, rememora esta frase como aquella que, en sentidos diversos, refleja su relación con la poesía. “Durante muchos años, fue una parte pequeña, pero crucial de mi vida. Cuando experimentas el punto más bajo de tus días, todo lo que necesitas son unas pocas palabras bien situadas para darle la vuelta a cualquier situación’’.

    Uno de los patrones que los escritores manifiestan, no solo en sus escritos sino también en la vida misma, es la manera de otorgar armonía y ritmo a cada línea y verso de cada poema. ¿Cuáles son algunas de las características intrínsecas que Kamilla considera que una persona debería tener para convertirse en escritora o escritor?

    “La disciplina y la paciencia vienen en primer lugar: dedicarse a la escritura es un trabajo difícil, que promete poco o, en tal caso, ninguna remuneración. Debes estar en ello por el arte, no por el dinero o la fama… Si es así, estás en el campo equivocado. Lograr completar cualquier cosa, ya sea un poema o un borrador, requiere que dejes de lado todas las distracciones y te sientes a escribir estando rodeado de los eventos y del ritmo del día a día que no parará de moverse. Eso es difícil de lograr, especialmente cuando eres joven y las personas tienen ciertas expectativas con respecto a tu propio estilo de vida. Se necesita tiempo y paciencia para poder construir una audiencia propia y para que la gente descubra tu arte”.

    Con 282k seguidores hasta hoy, recuerda y nos cuenta que la razón por la cual inició una cuenta en Instagram fue porque en una ocasión se publicaron algunos poemas de su perfil de escritores en Pinterest en IG, tal como sucedió con personalidades como Atticus y Rupi Kaur. Desde ese momento en adelante, no ha parado de crear.

     

    ¿Cuál es el mensaje detrás de su trabajo?

    “Mi trabajo es mucho más positivo ahora que cuando comencé. No ha sido debido a un cambio consciente, sino algo más que ha ocurrido en mi mente a medida que crecía, física y mentalmente; muchas cosas pasan desde los 18 hasta los 21 años. Mi deseo es darle paz a otros e inspirar a quienes necesitan una voz con carácter, un mensaje espiritual y esperanzador.

    En otras palabras, el mensaje que quiero transmitir es este:

    “La vida es una aventura milagrosa.
    Un hermoso viaje de resistencia y crecimiento para nuestras almas.
    Es un baile de luz y oscuridad,
    y las bendiciones siempre valen la pena al final”.

    En la actualidad, con tantas cuentas enfocadas en la escritura, en poesía y en mensajes de todo tipo en Instagram, en ocasiones se hace difícil encontrar la inspiración detrás de cada productor de contenido. Es probable que no sean preguntas frecuentes sobre una persona o sobre un escritor o escritora que seguimos en esta aplicación y red social, pero son elementos que hacen de su proceso y de su identidad: ¿cómo es el espacio que lo rodea, cuál es su rutina al componer, qué momentos en su vida han sido claves para su carrera?

    En el caso de Kamilla, sus fuentes de inspiración se encuentran en el arte, la fotografía, la música, pintura, los escritos de otras personas y, especialmente, en la naturaleza, y en las conexiones que se encuentran en ella.

    “Irónicamente, mis mejores escritos emergen cuando he estado ocupada haciendo otra cosa, en situaciones como cuando me estoy maquillando, limpiando la cocina y duchándome, entre otras. Son los momentos en que mis mejores pensamientos llegan, y el arte ocurre cuando corres y tu corazón palpita más fuerte, y debes encontrar un teléfono o un bloc de notas y apuntar todo eso en tu cabeza antes de que desaparezca. Cuando estoy bloqueada, me gusta moverme: bailar, hacer yoga o, mi favorito personal, salir a correr. Raramente escribo bien si me siento solo con la intención de escribir’’.

    La inspiración es una exclamación del alma que busca expresarse a través de nosotros. Esa exclamación no solo se limita al arte, sino que se manifiesta a través de varias formas. Se caracteriza por un profundo sentido de alegría y satisfacción; cuando nos inspiramos, perseguimos nuestra pasión, el tiempo se detiene y somos ajenos a todo lo que está pasando alrededor.

     

    ¿Cuáles son esos momentos en la vida de Kamilla en los que logra escribir y sentirse más inspirada?

    “Siempre he logrado escribir bastante bien recorriendo algún camino: en un tren, un autobús o un carro. No sé el por qué, pero hay algo sobre estar quieto y moverse al mismo tiempo que me hace sentir inspirada. De igual manera, escribo bien cuando mis emociones se encuentran elevadas; ya sea felicidad o tristeza, escribir siempre es una buena manera de procesar y considerar por qué mi estado mental se encuentra de tal forma. La escritura siempre se me ha dado mejor tarde en la noche, es cuando el proceso es más natural y decoroso”.

    Al tocar el tema del pasado, de recordar aquellos momentos que la han marcado como persona y los mismos que se han visto reflejados en su escritura, Kamilla compartió la siguiente frase:

    “Y la enfermedad mental es una tragedia
    porque perdemos a nuestros seres queridos
    mucho antes de que se hayan ido”,

    La escribió en el momento en que a su abuela le diagnosticaron demencia con cuerpos de Lewy y añade que, por medio de estas palabras, recibió mucha atención por parte de personas que se sentían de la misma manera y le manifestaron que es un tema que rara vez se aborda por medio del arte.

    Otro componente del lado artístico de Kamilla es que cada publicación de su cuenta de Instagram contiene un dibujo hecho por ella a mano, con el cual comunica y reafirma su gusto por la manera en que las palabras y las líneas simples se complementan. A segura que “hay algunas cosas que los dibujos pueden transmitir que las palabras no pueden y viceversa”.

    Kamilla, quien había producido todos sus escritos en danés antes del 2017, comenzó a partir de ese año a relatar cuentos y novelas en inglés, a sus 18 años. La versátil autora compartió su opinión en cuanto a que se necesita para triunfar en este campo actualmente:

    “No importa cuán talentoso seas, en estos tiempos modernos, eso no es suficiente. Todo se reduce a una cosa: marketing. Algunos podrían estar en desacuerdo conmigo, pero no creo que haya una correlación del 100% entre el talento y la fama en nuestro campo. Pienso que es una combinación de marca exitosa, marketing inteligente y un poco de tiempo y suerte. Para mí personalmente, el ‘venderme’ no es algo natural. Esa es una de las principales luchas y un proceso continuo que todavía estoy descubriendo. Supongo que, a medida que más y más personas ingresan al campo, cada vez es más difícil lograr destacarse”. Kamilla también comparte otra de sus apreciaciones sobre el tiempo:

    “El tiempo lo cambia todo.
    Incluso lo que pensamos era para siempre.
    Es una maldición y la mayor bendición.
    Especialmente en estos tiempos, me he dado cuenta de
    la rapidez con que todo va y viene, incluso lo que
    consideramos como ‘normal’ y ‘nuestro’”.

    Estos periodos de cambio, de receso y de aislamiento nos permiten escucharnos a nosotros mismos y, al vivirlos y extraer todas las sabiduría que contienen, logramos alejarnos del alboroto mental de nuestra vida cotidiana y orientar todo lo que somos como seres humanos hacia lo que nos hace bien. Kamilla secunda esta idea al señalar que su mayor reflexión durante este tiempo ha sido que “la quietud lo revela todo”.

    “Pienso que muchos de nosotros nos hemos percatado de muchas cosas en estos tiempos, hemos comprendido que todo lo que dábamos por sentado cuando el mundo era ‘normal’ puede transformarse en un instante. En la quietud de la cuarentena, nos hemos acercado a nosotros mismos y a los demás. A nivel personal, me di cuenta de cómo quiero que sea mi vida después de esta pausa, de la forma en la quiero pasar mi tiempo y de qué cosas no entran en la ecuación. De esa manera, creo que podríamos usar más descansos y quietud en general; de lo contrario, podríamos terminar corriendo toda nuestra vida sin darnos cuenta de que íbamos en la dirección equivocada, antes de que sea demasiado tarde”.

    “Exploro nuevos lugares para abrir mi mente a pensamientos diferentes,
    para atrapar emociones frescas y concebir ideas únicas.
    En los paisajes veo nuevas líneas que se convierten en dibujos.
    Y de la gente aprendo nuevas palabras.
    Y descubro nuevas verdades que se abren camino en mi poesía”.

    Se confiesa una observadora ávida de las complejidades, de la forma en que los humanos creamos nuestro propio mundo y, sin embargo, en el panorama general, somos solo una pequeña pieza en un enorme y magnífico rompecabezas. Agrega que algunas de sus obras literarias preferidas son The Bookthief, All the Light we cannot see, Anna Karénina y las grandes obras de Edward Rutherfurd como Russka, producción literaria que lleva al lector por un viaje de mil años a través de la historia rusa.

     

    Entonces, ¿de qué manera su profesión de escritora ha cambiado su forma de ver el mundo?

    “En cierto modo, mi cerebro puede ser entrenado para buscar cosas específicas. Después de que comencé a escribir poesía, adquirí la costumbre de intentar hacer conexiones y encontrar verdades vastas y profundas en contextos más pequeños. Esto definitivamente ha fortalecido mi creencia de que todo sucede por una razón y que los milagros sí ocurren”.

    “Sé la luna
    e inspira a la gente,
    incluso cuando estás lejos de estar lleno”.

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